La vastedad de la región amazónica y del ande en el Perú nos otorga una ventaja incomparable para desarrollar la actividad forestal y convertirla en un factor de crecimiento y progreso. Consciente de esa condición, el Ejecutivo ha dispuesto créditos por 500 millones de soles para que las micro, pequeñas y medianas empresas puedan aprovechar de manera sostenible los bosques y así aportar a la economía nacional.
Gracias a las normas promovidas por el Gobierno, se prevé que el desarrollo del sector forestal posibilitará incrementar el PBI nacional entre 1 y 1.5 puntos porcentuales, lo que redundará en mayores divisas, más puestos de trabajo, exportaciones de productos maderables de 150 millones a 300 millones de dólares anuales para 2017, y la reducción de importaciones en 50% al 2021.
Es fundamental destacar que ese potencial tiene un impulso extraordinario con la promulgación de cuatro reglamentos de Ley Forestal y de Fauna Silvestre N° 29763 y la puesta en marcha del Plan Nacional de Diversificación Productiva, habida cuenta que el 65% del país es amazónico, y de esa zona, más del 80% tiene condiciones inmejorables para conseguir miles de hectáreas de madera obtenida de forma sustentable.
La visión del Gobierno es que los bosques tengan un manejo adecuado para posicionar la explotación forestal como uno de los nuevos motores de la economía, en respuesta a los grandes retos globales como la lucha contra la deforestación y el cambio climático. Pero, además, el conjunto de normas promoverá actividades de ecoturismo y los negocios de productos no maderables como harina de algarrobo, orquídeas, aguaje en pulpa, aceite de ungurahui, tara, entre otros.
Además, contribuirán a controlar la tala ilegal mediante el fomento del mercado de madera legal, así como estimular iniciativas como el Pacto Nacional por la Madera Legal; y, sobre todo, visibilizará el verdadero valor del bosque peruano con un enfoque integral, que más allá de ser proveedor de madera, brinda una serie de bienes, servicios y oportunidades.
Lo más importante es que permitirá impulsar negocios desde las comunidades nativas y campesinas, debido a que podrán obtener mayores ingresos y mejorar su calidad de vida. De hecho, el Estado ha focalizado su atención en estos segmentos de la población, y por primera vez, en el marco de la Ley de Consulta Previa, puso a consideración la normativa y reconoció los derechos colectivos de los pueblos al asegurar su participación real en la gestión del patrimonio forestal y de fauna silvestre.
El Ejecutivo ha dispuesto créditos por 500 millones de soles para que las micro, pequeñas y medianas empresas puedan aprovechar de manera sostenible los bosques y así aportar a la economía nacional.
Fuente: El Peruano
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