El mayor edificio de oficinas totalmente pasivo de Europa se inauguró en Tour & Taxis, una de las principales áreas de regeneración urbana de Bruselas, situada en el muelle del puerto interior de la ciudad. Este área debe su nombre a los fundadores del sistema postal belga, la familia Von Thurn und Tassis. Tour & Taxis, que a finales del siglo XIX fue un importante centro de transporte equipado con infraestructuras fluviales y ferroviarias, informan desde la American Hardwood Export Council.
Para empezar con el importante plan de regeneración urbana en esta zona de la ciudad belga, el gobierno regional de Bruselas decidió poner en marcha un proyecto insignia ubicando la nueva sede de la Agencia de Medio Ambiente de Bruselas en Tour & Taxis. Debido a su voluminoso tejado de color negro, los habitantes de Bruselas pronto han comenzado a denominar al nuevo edificio “la tostadora”. Diseñado por el estudio de arquitectura holandés Cepezed, el edificio es un escaparate de las tecnologías más avanzadas en el campo de la eficiencia energética.
Proyecto de diseño sostenible
Las nuevas oficinas se disponen alrededor de un atrio central de siete plantas de altura cubierto por un tejado que, al ser transparente, permite la entrada de la luz natural durante todo el día. Aunque al aproximarse al edificio éste destaca por su revestimiento exterior de aluminio de color negro, con el fin de absorber la luz solar, una vez se ha atravesado la entrada principal el visitante se ve envuelto por la atmósfera espaciosa y diáfana del atrio principal. La estructura metálica de soporte está pintada en blanco en su totalidad y, si se levanta la vista hacia arriba, pueden verse los suelos de hormigón de color gris claro de las diferentes plantas. El tejado con triple acristalamiento asegura un buen nivel de aislamiento y un sistema de persianas automáticas protege el atrio contra la luz solar durante los meses de verano.
El gran espacio abierto de la planta baja, en el que se encuentra el mostrador de información de la Agencia, de forma ovalada, conecta el edificio con la plaza adyacente y albergará a partir de 2016 una exposición sobre los desafíos medioambientales principales a los que se enfrentan las ciudades en el siglo XXI. La escalera principal rodea el perímetro del atrio central creando una serie de balcones abiertos en los diferentes niveles de las plantas, desde los que se domina el atrio completo.
Esta gran escalera es en realidad una ampliación de las gradas del auditorio adyacente, situado en el lado oeste del edificio, que alberga 415 coloridas butacas y suelos de madera. En la primera planta, un restaurante con vistas al atrio central sirve menús ecológicos, mientras que las plantas superiores, bañadas por la luz solar, albergan un laboratorio y oficinas de planta abierta.
Mamparas de madera de gran altura
Por las diferentes plantas se reparten alrededor de 900 metros cuadrados de mamparas de madera diseñadas por Nathalie Daele, arquitecta interna de la Agencia. Fabricadas en cerezo estadounidense, sirven para organizar los espacios de trabajo en las oficinas, que son en su mayor parte de planta abierta. Los tonos cálidos e intensos del cerezo destacan notablemente contra el blanco liso y el gris claro de los techos y los suelos de hormigón. Las mamparas de madera introducen en el edificio un elemento natural que crea, además, una seña de continuidad en las diferentes plantas.
En el centro de información de la Agencia de Medio Ambiente de Bruselas, situado en la primera planta junto al restaurante, una mampara de madera formada por listones de cerezo estadounidense abarca casi toda la anchura del centro de visitantes. Los listones de cerezo de casi tres metros de altura se han montado verticalmente colocando sus testas sobre una base de madera maciza. Algunos listones se han teñido utilizando el patrón cromático que se repite por todo el edificio y en el que cada color representa cada uno de los ámbitos de las ciencias medioambientales que cubre la Agencia.
De acuerdo con las diferentes distribuciones de las plantas, el arquitecto ha combinado mamparas abiertas de listones de gran altura con mamparas de madera cerradas de menor altura. Las de listones permiten que la luz natural procedente del atrio central se adentre en el edificio a través de las rendijas, mientras que las mamparas cerradas ocultan elementos funcionales como percheros y fotocopiadoras, o simplemente proporcionan intimidad a ciertas áreas de reunión. Las mamparas cerradas están fabricadas con cerezo macizo de 18 mm. de grosor ensamblado con uniones machihembradas en anchuras que oscilan entre 90 mm. y 180 mm.
Fuentes: Interempresas, Construible.