A pesar de los riesgos, así como las fuentes de inversión, son preocupaciones importantes para la industria de los bio-productos de la madera, las perspectivas y las posibilidades a largo plazo son brillantes. Ese fue el mensaje transmitido en la sesión de la Convención COFI de esta industria emergente, que abarca una amplia variedad de productos derivados de la madera, incluyendo materiales, combustibles, productos químicos, resinas y alimentos, incluso con azúcar basado.
Trevor Stuthridge, Vicepresidente de Innovación de PF, hizo hincapié, sin embargo, que la industria bio tiene que integrarse en la cadena de valor existente de productos de madera. Por ejemplo, ve grandes posibilidades para la lignina de la madera subproducto que podría ser utilizado para desarrollar productos que reemplazan las colas en la fabricación de madera de ingeniería.
Otra área nueva y emocionante es la producción de azúcares de la madera. Actualmente en el mundo, una gran cantidad de valiosa tierra agrícola es absorbido por el cultivo de productos relacionados con el azúcar. La madera tiene una «ventaja maravillosa», ya que no es un competidor para estas tierras de cultivo y de azúcar sustancias derivadas de que puede ser utilizado para la bio-plásticos, aditivos alimentarios, polímeros, y así sucesivamente.
West Fraser tiene una serie de bio-operaciones, ya sea en el camino o en la fase de desarrollo. Vara Albers, de West Fraser, explicó que estos incluyen dos plantas de energía que utilizan la biomasa (uno en Fraser Lake, el otro en Chetwynd), una planta de recuperación de lignina / bio-refinería en Hinton, y una operación de pulpa de bio-metanización en Slave Lake. La bio-refinería en Hinton está buscando actualmente en el desarrollo de la producción de carbón activado, que es una sustancia que se utiliza para el control de emisiones y la absorción de las impurezas. Otra área de desarrollo es lo que se denomina material de celulosa avanzada, que incluye fibrillas de celulosa nano (CNF), un producto de la fuerza versátil y de alta. Aunque estos nuevos productos biológicos son emocionantes, advirtió que implican un mayor riesgo del que las empresas forestales tradicionales pueden estar dispuestos a asumir.
Torrefacción es un proceso que implica el tostado de la madera y es la segunda generación en la producción de pellets de madera. El resultado final es bio-carbón y que es lo que ahora se está produciendo en Diacarbon Energía en Merritt, BC. El presidente de la compañía, Jerry Ericsson, explica que la bio-carbón tiene muchas ventajas sobre ambos pellets de madera (mayor densidad de energía) y carbón extraído (menores emisiones, carbono neutral, que no están sujetos al impuesto sobre el carbón). Sin embargo, el mayor obstáculo para la torrefacción es el acceso al capital, y las operaciones necesitan apoyo tanto de los inversionistas y el gobierno.
De Sandy Ferguson, vicepresidente de Desarrollo Corporativo de Conifex, señaló que el crecimiento en el sector bio-química es fenomenal y que los productos químicos de especialidad son cada vez más atractivos. Señaló que en la actualidad 25 bio-refinerías estaban operando o ya sea en construcción en los EE.UU. Pero, al igual que Jerry Ericsson, ella dice que es «un entorno difícil para la obtención de financiamiento.»
Fuente: 250 Noticias