
The Washington Post publicó un editorial cuestionando la dirección de la EPA sobre las nuevas normas que proporcionarían créditos para las fuentes de energía alternativas, incluyendo la bioenergía y el uso de como fuente de combustible. El editorial sostiene que la posición de la EPA sobre la bioenergía y el uso de pellets de madera como fuente de energía daría lugar a la explotación masiva de los bosques de nuestra nación.
El argumento del Washington Post es realmente la falta árboles en el bosque. La EPA estableció un camino hacia adelante para tratar las emisiones biogénicas de carbono que no son preceptivos en la naturaleza y que se desarrolla una reglamentación para plantas de energía con el fin de reducir las emisiones de carbono al tiempo que reconoce la flexibilidad regional en lo que respecta a la forma en que se cumplen estas reducciones. Decir que la EPA ha fomentado el uso de la bioenergía y por lo tanto el aumento de la cosecha de los bosques no es simplemente verdad. Para ir más allá y afirmar que el resultado inminente sería la cosecha del 70 por ciento de nuestros bosques es una extralimitación drástica.
La realidad es todo lo contrario. El cierre de las oportunidades para los propietarios de bosques privados para encontrar nuevas vías de ingresos no va a ayudar a preservar nuestros bosques, por el contrario, nos hace menos competitivos y puede dar lugar a algunos propietarios de tierras buscar otros usos de los bosques, incluyendo el desarrollo. El Servicio Forestal de Estados Unidos confirman que una mayor demanda de pellets de madera como fuente de energía se traducirá en la plantación de más bosques. El estudio, que se centró en los efectos del mercado bioenergético sobre el inventario de los bosques (Efecto de las Políticas de Producción de pellets y los bosques en los EE.UU del Sur, 2014), a financiar esa zona maderera con un aumento en la demanda de pellets de madera de ese modo más plantaciones se establecerán en tierras agrícolas marginales.
Los mercados para productos forestales incentivan a los terratenientes para seguir aumentando los bosques para su beneficio económico. Como condado, nos beneficiamos de todos los servicios ambientales que estos bosques proporcionan. Si nos fijamos en el marco de la EPA por el camino equivocado, ponemos en riesgo los incentivos necesarios para mantener nuestros bosques y sus propietarios para la próxima generación.
Fuente: Forest America