En Chile existen alrededor de 13,5 millones de hectáreas de bosques nativos en distinto estado de desarrollo y nivel de conservación. Es indiscutible el valor de estos bosques en el balance hídrico, captura de carbono, mantención de la biodiversidad, control de la erosión, recreación, alimentación, turismo y otras funciones de vital importancia para nuestro país. Sobre la cifra total anterior, queremos focalizar nuestro análisis en los bosques nativos de segundo crecimiento (BNSC), que genéricamente se denominan renovales. Estos bosques, aunque son nativos, surgieron principalmente como respuesta a erupciones volcánicas, incendios, roces y a la apertura de bosques por extracción de madera o intento de cambio de uso de suelo, creciendo en forma aparentemente desordenada, buscando la luz. Hoy ofrecen un enorme potencial, tanto para la producción de madera, como para alimento, biodiversidad y otras funciones ecosistémicas vitales para miles de chilenos que actualmente viven de ellos, ya que existen 1,4 millones de hectáreas aproximadamente, entre renovales densos y semi-densos, por lo que es importante analizarlos con detención.
Leer más